Es muy posible que a lo largo del ciclo vital nos encontremos con las llamadas “crisis” vitales o existenciales, que no son más que pequeños baches en el camino, es decir, son todas aquellas situaciones que de alguna forma implican que introduzcamos cambios en nuestra forma de vida y con ello, nos obligue a salir de nuestra zona de confort, lo que se traduce en mayor inestabilidad y tensión emocional.
En muchos casos, estas crisis forman parte del proceso evolutivo y es algo totalmente normal, que al igual que aparecen, pueden desaparecer por sí solas, pero puede suceder que dichas crisis se prolonguen a lo largo del tiempo y nos exijan disponer de recursos y herramientas nuevas para afrontarlas. Ante estas situaciones, a veces, podemos sentirnos un tanto confusos, no sabemos si seguir esperando más tiempo a que todo pase, si pedir ayuda profesional, pero igual no nos vemos tan “mal” como para iniciar un proceso terapéutico, o quizás, lo vemos necesario.
Las asesorías son un servicio que ofrecemos desde Vínculo Emocional para precisamente poder dar respuesta a todas esas dudas y guiarte en la gestión y superación de las llamadas crisis vitales.
Se trata de sesiones de 30 minutos de duración con uno de los profesionales de nuestro equipo, con quien poder compartir la situación actual, con el objetivo de poder estructurar un plan de trabajo de una forma individualizada y adaptado a las necesidades que dicha situación pueda requerir.
Muchas veces, no es necesario un plan de trabajo continuo, simplemente, una guía de cómo poder actuar ante una situación determinada. En estos casos, son muy valiosas las asesorías, ya que nos permiten obtener información y conocer en mayor profundidad lo que está sucediendo, además de recibir orientación respecto a cuál puede ser el plan de tratamiento más acertado en este caso.
La diferencia entre llevar a cabo una terapia o una asesoría radica fundamentalmente en el tipo de situación que se esté dando, esto es, cuando el grado de malestar esta vinculado a una situación actual concreta y momentánea, es muy posible que no sea necesario realizar un proceso terapéutico, sino simplemente obtener una serie de recursos personalizados con los cuales poder gestionar el grado de malestar, sin embargo, cuando dicho malestar se alarga en el tiempo, se desconoce de dónde puede venir o tenemos muy claro que conecta con parte del pasado, entonces, sí es aconsejable realizar una terapia, para poder trabajar y conectar con uno mismo en mayor profundidad.
No obstante, en esta sesión, el profesional se encargará de dar feedback sobre cuál puede ser el tratamiento más conveniente en estos casos, si a través de la asesoría puede ser suficiente o si el caso requiere de mayor trabajo, y por tanto, es necesario iniciar un proceso terapéutico.
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